
Presentamos la memoria de actividades de 2023, un año marcado por la revisión de las operativas de los equipos de la Fundación, la optimización de las instalaciones y el firme compromiso con la sostenibilidad.
Se ha mejorado la calidad del trabajo de los y las profesionales con la creación del Espacio de Reflexión Ética en Servicios Sociales (ERESS) y el Servicio de Atención Espiritual y Religiosa (SAER). El primero es una fuente de consulta para resolver problemas éticos en el cuidado de las personas vulnerables, mientras que el segundo supone una mejora directa en el bienestar de las personas atendidas.
En el Área de Personas y Valores, se ha mantenido la firme apuesta por la capacitación de la plantilla, con casi cuatro mil horas de formación, repartidas en setenta y cinco cursos. Así mismo, se ha recuperado el encuentro anual, un espacio lúdico y enriquecedor que fortalece el sentido de pertenencia de todas las personas que colaboran con la Fundación.
En el ámbito económico, se ha avanzado significativamente en la sostenibilidad de la entidad mediante la concertación de los dos programas de más volumen económico.
En la Llar Sant Joan de Déu se han iniciado las obras para cambiar el modelo de acogida residencial por un de nuevo que potencie la adquisición de autonomía de las familias y personas acogidas, haciéndolas protagonistas de su propio proceso.
Además, se han implementado varias medidas para minimizar el impacto medioambiental de la Fundación, como la instalación de placas fotovoltaicas en la Llar Sant Joan de Déu y en Catellbisbal.
Todos estos pasos hacia una entidad más moderna, eficiente y próxima han sido posibles gracias a los y las profesionales, voluntariado y alumnos de prácticas que, con su compromiso y buen hacer, dan sentido al trabajo de la Fundación.